Querido diario:
No es posible decir que se le agote a uno la capacidad de asombro. Nuestro presidente del gobierno ahora se cree que es JFK. Y nos larga lo que en su boca y persona, no puede pasar de ser una monserga: Lo de que en vez de decir “Qué pueden hacer los demás por mí” digamos lo de “Qué puedo hacer yo por los demás” y quitando eso, no hay más novedad que nos acaba de anunciar dos semanas más de cárcel pero ni media palabra del material sanitario. De seguir así, seguiremos esperando a doblar la curva por el propio decurso de la naturaleza, seguirán muriendo españoles que ni era su hora ni se lo merecían, no parece que vayan a llegar ese material sanitario que nos permita ser eficaces para volver a nuestra vida normal, aunque sea poco a poco, y no destrozar nuestra sociedad. Hay países que ejercen la piratería y nos lo roban en su transporte y nos dicen que eso es así, que es normal. Me acuerdo de mis clases de Derecho Internacional Público y Privado, de las patentes de corso, de la Armada Invencible y de lo que hemos sido como nación y lo dejo, mejor no sigo dándole vueltas al tema.
Me quedo con el consuelo de la valoración que dan los ciudadanos a los Ayuntamientos, a las Comunidades Autónomas, al Gobierno de España y a la Comunidad Europea en la gestión de esta tragedia.
Los Ayuntamientos no salimos mal. Un notable bajito. Me siento orgulloso. Somos los que menos recursos tenemos pero lo suplimos con las personas, con los recursos humanos. Lo estamos haciendo lo mejor que podemos y parece que podemos hacerlo bastante bien. A lo mejor deberíamos pensarnos las cosas cuando esto termine y dejar que nuestros recursos económicos y productivos sean mejor gestionados por quienes mejor están demostrando que saben hacerlo. Si además nos dejarán votar listas abiertas, ni cerradas ni bloqueadas, en las elecciones municipales, a lo mejor también podríamos aspirar al sobresaliente, aunque fuera también bajo.